La Quinoa es una semilla ancestral que proviene de la zona andina, es decir de latino américa y su cordillera de los andes, y por muchas generaciones de aborígenes locales ha sido venerada como “la madre de los granos”. Sus propiedades curativas al natural hacen pensar a los especialistas que es una de las más completas y es lo que le permitió a generaciones muchas generaciones de aborígenes mantenerse saludables y fuertes. Es por ello que es indispensable para la alimentación de la actriz Gwyneth Paltrow.
El hecho de que no necesite aditivos ni conservantes la hace aún mejor. Los especialistas en cultivos afirman: “Todo lo que venga de la tierra, es decir, que no contenga conservantes ni sea industrializado, aportará mayor cantidad de beneficios. En la antigüedad se comía lo que se cosechaba y al no contener aditivos ni existir procesos que alteran el alimento, se protegía la salud”.
Los nutricionistas y dermatólogos destacan la Quinoa por sobre el resto ya que no cuenta con ningún elemento que pudiera perjudicar al sistema humano: Un producto que suma cada vez más adeptos y que de a poco se fue ganando un lugar en la cocina local e internacional. Debido a sus múltiples beneficios para la salud. Es libre de gluten, ideal para los celíacos y apto para diabéticos ya que tiene un índice glucémico bajo.
Otro grupo que la utiliza considerablemente es el de los deportistas ya que también es de gran ayuda para el ejercicio físico. Aporta energía proveniente de los macronutrientes, que hace que mejoren su rendimiento y resistencia y al ser fuente de proteínas, mantiene saludables los músculos.
En paralelo, detalla que al ser rica en fibra, colabora con el correcto funcionamiento del sistema digestivo y ayuda a procesar de manera eficaz los alimentos. Por otro lado, protege el sistema cardiovascular porque “reduce el nivel de colesterol malo (LDL) en sangre. Es por todo ello que la Quinoa es una semilla más que necesaria.