La Reina Isabel II siempre ha sido conocida por tener un carácter fuerte y exigente, especialmente con su servidumbre. Los empleados de la realeza han sido testigos de cómo la monarca rechazó, en más de una ocasión, platos preparados por sus chefs y hasta se enfadó con ellos.
Uno de los episodios más famosos fue cuando, según rumores, la Reina Isabel II tiró al suelo platos llenos de ostras y mariscos, que eran una de las comidas preferidas de la princesa Diana. Los empleados de la cocina aseguraron que sólo estaban siguiendo las órdenes de la princesa de Gales, sin saber que esto molestaría tanto a la reina.
Lady Di, al pedir este platillo de mariscos con un fantástico aderezo que contenía ajillo, no se encontraba en conocimiento del rechazo que este tipo de comida le producía a la Reina Isabel II y por tanto la sorpresa del mal momento pasado por ella y por el servicio del Palacio fue sumamente devastador.
Pero desde entonces los encargados de la cocina se aseguraron de que ese error no volvería a ocurrirles y por lo tanto en el palacio de Buckingham se aseguraron de no volver a preparar ese tipo de platillo y de advertir a sus comensales sobre las preferencias culinarias de la Reina.
A pesar de los esfuerzos de Lady Di por llevarse bien con su suegra, el desprecio de la Reina hacia ella siempre fue evidente. Sin embargo, Diana siempre se esforzó por cumplir con los protocolos de la corona real británica y este episodio se transformó en un secreto a voces, algo que quedó como un rumor.