La princesa de Gales ha marcado este año con la noticia más inesperada para el mundo. Tras el anuncio de la enfermedad que ahora enfrenta, hemos tenido que acostumbrarnos a verla en menor medida en los eventos reales. Sin embargo, Kate Middleton ha hecho algunas apariciones públicas, como en el Trooping the Colour y recientemente en la final de Wimbledon. En ambos ha mostrado señales de cómo se encuentra su salud; aquí te contamos cómo se encuentra.
El conmovedor recibimiento del público a la aparición de Kate Middleton
La final de Wimbledon es uno de los torneos más importantes de tenis, por lo que Kate Middleton aprovechó este relevante suceso en el mundo del deporte para unirse a la recta final del campeonato el pasado 14 de julio del 2024. Como forma de recibimiento, en compañía de su hija Charlotte, el público le dio una ovación de pie en la cancha central como expresión de apoyo por su lucha contra el cáncer.
Tras el evento, Judi James, experta en lenguaje no verbal, ha interpretado algunos de los movimientos de Kate Middleton, según el medio The Mirror. En la lectura de labios, parece que la princesa de Gales pudo haber dicho a su hija que prefería que ganara el serbio Nicola Hickling. Pero además de identificar a quién apoyaba en el campeonato, también reveló que hubo algunos gestos que pudieron haber sido muestra de su estado de salud.
Las señales que dio Kate Middleton sobre sus síntomas de la quimioterapia en su cuerpo
La princesa de Gales asistió a la final de Wimbledon con un vestido morado en el que lucía hermosa, radiante y elegante. Durante el juego, se mostró muy contenta, con ánimo e incluso emocionada. Sin embargo, de acuerdo con Judi James, hubo algunos movimientos en su lenguaje corporal que pudieron haber sido el reflejo de que necesitaba tranquilizarse mientras estaba ante el ojo público.
Según James para The Mirror, Kate Middleton tocó de forma innecesaria su pelo, una y otra vez, algo que pudiera ser señal que necesitaba tener sentirse más segura o estaba muy nerviosa. Se trata de un gesto de búsqueda de autoconfianza, algo que podría hacernos suponer que quizá la consorte del prínicipe William no se encontraba tan cómoda como aparentemente se veía, algo totalmente normal pues la quimioterapia agota la energía del cuerpo. También se le notó el rostro muy cansada mientras llevaba gafas de sol.