MÚSICA

Zayra Ruiz, la soprano mexicana que triunfa por el mundo

Participó en una Gala de Zarzuela en el Teatro Villamarta de Jerez de la Frontera. El programa que se interpretó fue muy completo y se llevó el aplauso más grande que concede Jerez, por bulerías.

Fuente: V.B./Ana Álvarez/ Roberto Alcain/Jesús Cornejo.
Zayra Ruiz..Fuente: V.B./Ana Álvarez/ Roberto Alcain/Jesús Cornejo.
Escrito en TENDENCIAS el

Es una auténtica revolución. Pura energía y con una voz impresionante que  hace temblar los cimiento de los diferentes teatros nacionales e internacionales por los que arrasa. Se abrió el telón del coliseo jerezano y nada más aparecer sobre el escenario la artista conecta con su pública de una manera indescriptible porque su voz, su puesta en escena, su elegancia a la hora de interpretar es tan grande como ella. Hablamos de la soprano mexicana Zayra Ruiz, la voz. Esta artista está en plena renovación. Ha pasado de ser Mezzosoprano a soprano, algo poco común en el mundo de la lírica y está en plena adaptación a su nuevo registro. Un camino duro, de mucho sacrificio, de mucha inversión pero de una gran satisfacción personal.

El Teatro Villamarta rindió el pasado fin de semana un homenaje al género lírico español, recientemente declarado Manifestación Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial, con una espectacular Gala de Zarzuela celebrada en el coliseo  jerezano donde los amantes de la música vibraron con el espectáculo.

La soprano mexicana Zayra Ruiz, que era la segunda vez que actuaba en el teatro de esta localidad gaditana, levantó al público de los asientos con sus imponentes interpretaciones. Y es que la cantante posee unas cualidades vocales que le permiten abarcar todo tipo de género, tal y como demuestra la carrera artística que ha desarrollado a nivel internacional. Para Zayra Ruiz, cantar “es algo más que una profesión”, pues busca “sembrar una semilla de amor e inspirar a los más nobles sentimientos” a través de su canto. 

Esta cantante internacional mexicana, galardonada y ganadora de varios premios internacionales en España, Italia, Canadá, México y Japón, demostró el pasado fin de semana en la localidad gaditana que su profesionalidad y su talento traspasan fronteras.

Zayra Ruiz. Fuente: V.B./Ana Álvarez/ Roberto Alcain/Jesús Cornejo.

Destaca por su inigualable carisma, encantador histrionismo y de voz tanto bella como versátil, Zayra tiene el poder de envolvernos en sus interpretaciones y llevarnos en un viaje de emociones a través de su canto y su veracidad.  Sus cualidades vocales le han permitido abordar un amplio repertorio, que comprende desde el periodo barroco al contemporáneo: ópera, zarzuela, oratorio, canción de conciertos de distintas nacionalidades, crossover y también folclore mexicano, todo ello le ha llevado a participar en conciertos y producciones en diferentes partes del mundo, como Italia, Portugal, Alemania, Francia, Reino Unido, Países Bajos, Estados Unidos, Colombia, Canadá y México

Su salida al escenario es una explosión de vibraciones positivas y su conexión con el público se palpó desde el primer segundo, consiguiendo la aprobación más alta al final de sus interpretaciones que es el aplauso más grande que concede Jerez, por bulerías.

Embajadora Internacional de Juventud por la Paz

Destacar igualmente que Zayra Ruiz a parte de su carrera internacional, es una notable mexicana, se le ha nombrado recientemente  como Embajadora Internacional de Juventud por la Paz, ha sido galardonada con el premio ‘Mérito de las Artes’, forma parte de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística  y ha formado parte del emblemático  Instituto Nacional de Bellas Artes en Solistas Ensamble, de la Sociedad Internacional de Valores de Arte Mexicano y del sexteto vocal femenino Túumben Paax.

El repertorio de piezas que se interpretaron durante la Gala de Zarzuela fue de un alto nivel con títulos tan variados como célebres: ‘La tabernera del Puerto’, ‘Luisa Fernanda’ o ‘Doña Francisquita’ fueron interpretadas por las sopranos Maribel Ortega y Zayra Ruiz, el tenor Manuel de Diego, el barítono Carlos Daza, que sustituyó a Luis Cansino, que fue baja de última hora por enfermedad, y el bajo Gregoria García, además del impresionante Coro del teatro jerezano la Orquesta Álvarez Beigbeder, bajo la batuta de José Colomé.  

Al término del show pudimos hablar con la artista mexicana quien atendió a Panorama España y nos contó todo lo que ha pasado hasta llegar donde está, nos habló de sus sueños, de los retos que se marca y del camino que aún le queda por recorrer.

Zayra Ruiz. Fuente: V.B./Ana Álvarez/ Roberto Alcain/Jesús Cornejo.

-Es la segunda vez que viene al Villamarta en Jerez ¿Qué conexión tiene con el público de esta ciudad?

-El público jerezano es tan increíble…Cuando escuche por primera vez como aplaudían, por bulerías, me sentí muy querida y aceptada. Ya me siento de aquí. Venir a esta ciudad es sentirme como en casa. 

-¿Cree que podría fusionarse la lírica con el flamenco?

-Siempre he abogado por hacer fusión, respetando siempre las parcelas de cada uno. ¡Porque no ser creativos! A mí me encantaría.  

- ¿Le ha dado la vida más de lo que esperaba?

-Pues mira ver que la gente vibra y disfruta con mi canto y se va a su casa con otra actitud…me hace sentir diferente y me reconforta. Ser el canal para transmitir sentimientos a las personas que vienen a verme es lo más grande que me puede pasar. En cuestión de sueños, aún me falta. Pero cada cosa que realizo es algo muy grande y cuando un equipo se complementa a la perfección es un logro impresionante. Mi historia es muy particular y siempre intento dar lo mejor de mí para lograrlo.

-¿Particular? 

-Bueno pues porque era mezzosoprano y hace poquito tiempo he cambiado a soprano y esto no es algo muy común en mi carrera. Suele pasar lo contario. Cuando decido cambiar de residencia de México a Europa había muchos proyectos pero a la vez muchos cambios y retos por delante. Y de repente encontré una maestra en Nueva York que me dio muchas pautas, herramientas que me calmó, tranquilizó, me ayudo a escuchar a mi cuerpo, a mi voz y ella fue una parte muy importante en mi camino de crecimiento. El cambio fue de mucha responsabilidad. Y posteriormente, en una de los festivales en los que aún era mezzosprano conocí al que actualmente es mi maestro vocal con el que he hecho un gran equipo y estoy inmensamente feliz y contenta porque el registro en el que me encuentro ahora está tonificado, es natural, el de soprano va in crescendo. Tengo ahora una experiencia en el escenario pero aprendiendo con mucha ilusión repertorio nuevo y conociéndome aun con la nueva voz. Pero voy con todo el amor del mundo. Ahora sólo quedar seguir caminando hacia adelante para dar lo mejor. 

- ¿A quién se encomienda cuando sale al escenario? ¿Tiene algún amuleto o alguna manía?

-Me reconecto de lo divino de ese Dios que para mí es un todo, el gran amor supremo del que todo permanecemos. Me pongo a su servicio y le digo ayúdeme, acompáñeme y que todo fluya de la mejor manera.

- ¿Quiénes son o han sido sus referentes en el mundo de la lírica? ¿Sus ídolos?

-Pues principalmente María Calas. Con 13 años la escuche y fue un impacto. Sólo te diré que dije quiero cantar como ella. Y pensé no quiero, puedo hacerlo. Pero admiró muchísimo a otras grandes con las que me identifico con ellas como Regine Crespin, una gran cantante francesa. 

- ¿Qué es lo más grande e inolvidable que ha hecho hasta este momento de su carrera musical?

-Hay cosas muy grandes pero desearía que siguieran pasando. Lo más grande que me pueda pasar es causar un positivo impacto, es mi mayor satisfacción. Que vengan a verme miles de personas es algo que me hace sentir muy orgullosa. Pero ahí vamos tratando de llegar cada vez a más personas. 

-¿Siente vértigo cuando sale al escenario y ve a todo ese público que le va poner nota?

-Pues mira vértigo no siento, pero siento que van a estar ciertas personas que impactan. Nervios siento mucho, hasta en los ensayos. Pero sabiendo que hay público que va ser más exigente, trato de fluir.

- De no haber llegado al mundo de la lírica ¿qué hubiera hecho o qué le gustaría haber sido?

-En casa siempre escuchamos música bonita, de orquesta, de danzas. Pero no tengo familia de artistas cercanos. Aunque te diré que desde bien pequeñita mostré un gran interés por el arte, me encantaba bailar, cantar, todo lo que fuera en el escenario me fascinaba. Desde pequeña estuve en clase de ballet, de piano, estuve en un coro, así es que ahí me di cuenta que me fascinaba cantar. Casi que lo traje impreso en el ADN. (Risas)

-¿Qué le dicen sus papas viendo a su hija triunfar?

-Lo disfrutan mucho. Mi mamá me dice párate ahí, disfruta y brilla. Mi papá se pone nervioso y lo vive con el deseo que me vaya muy bien. Es una carrera dura, difícil y de fondo, donde hay que invertir mucho porque si quieres llegar a cierto nivel hay que echarle muchas ganas, la competencia es muy grande pero hay lugar para todos. Pero cuando estoy en el escenario me olvido de todo eso.  Lo que hacemos nosotros con la música es pura divinidad  y hay que dar lo mejor sin que hubiera competencia. 

Pero mi lema es ningún marinero se hizo en aguas tranquilas. Mi deseo es que ninguna persona se vaya del teatro indiferente, que le pueda aportar algo de alegría, que sienta, si vino triste, se vaya contenta, diferente. Eso lo he visto y hace sentirme orgullosa y muy feliz. 

- En la profesión de la lírica ¿Cuál es su obra favorita?

-Una que me dio mucho que aprender y satisfacción fue Carmen porque me siento muy ella. Me identifico mucho con la mujer guerrera, que lucha por sus ideales, que habla lo que siente, siempre desde el respeto. Todo el repertorio que cantó María Calas. Pero igualmente me encanta Tosca, Butterfly, La reina de la noche, La Traviata, donde ahora ando trabajando y es un gran reto como a todos los que me estoy enfrentando. 

- ¿Cómo hace para desconectar de esas emociones tan dramáticas que cuenta la lírica? Algunas son historias muy trágicas...

-La verdad es que ha sido un proceso porque hay que saber vivirlas como una gran actriz, hay que moderarse y no ser pasional  y que no te afecte. En el escenario ya he hecho un proceso y ya disfruto a la hora de interpretarlo y lo llevo de una manera orgánica en todos los aspectos.  

- ¿Cree que el idioma en la lírica influye en la transmisión de las emociones al público? o dicho de otro modo ¿qué es más emocionante oír una ópera en italiano, alemán o hispano?

-Sí influye, pero no debería porque la música ya de por sí ya transmite. Para transmitir un sentimiento no tiene que ser necesario.

- ¿Cuál es la catedral de la lírica?

-El gran coliseo milanés, la Scala de Milán. Pero en España tenemos el Teatro Real. 

-Un sueño que le gustaría cumplir a corto, medio plazo

-Es un gran sueño cantar en la Scala de Milán. Aún no lo he hecho y estar allí sería uno de mis mayores sueños. Y… en Estados Unidos, en el The Metropolitan  Opera House sería otro gran reto. Y que los amantes de la música sientan alegría  cuando me vea en algún concierto o anunciada en un cartel y digan quiero escucharla, porque eso me da una alegría inmensa.